El Alzheimer, una enfermedad silenciosa pero prevenible

Desde 1994, la Organización Mundial de la Salud (OMS) en conjunto con la Federación Internacional del Alzheimer estableció que cada 21 de septiembre se conmemora el Día Mundial del Alzheimer, una enfermedad degenerativa que representa la forma más de demencia común entre las personas mayores.

De acuerdo con la Fundación Alzheimer de Venezuela, al menos 200.000 adultos mayores padecerán esta enfermedad que cada día va en aumento, no solo a nivel nacional, sino también mundial.

Daniela Servitad, psicóloga de esta fundación con más de 30 años apoyando a pacientes con este diagnóstico, explica que la edad promedio del inicio de este padecimiento es 65 años. Sin embargo, los síntomas más visibles pueden presentarse entre 10 y 20 años después. La especialista también compartió que las principales manifestaciones se centran en las fallas de la memoria expresadas recientemente en preguntas repetitivas, la desorientación en el espacio, los cambios de humor, los arrepentimientos o el aislamiento.

EL ALZHEIMER NO ES OBLIGATORIAMENTE PARTE DE LA VEJEZ

“La demencia no tiene por qué ser parte del envejecimiento. Nosotros deberíamos ser capaces de llegar a la vejez sin desarrollar estos padecimientos”, señala Daniela.

Aunque se desconocen las razones del Alzheimer, la enfermedad se asocia a padecimientos cardiovasculares, diabetes, traumatismos en la cabeza, consumo intenso y frecuente de alcohol y drogas u otros factores que pueden aumentar los riesgos de desarrollar la condición.

Por otra parte, también hay ciertos estudios que indican que existe un gen específico que se traspasa a través de la línea materna; sin embargo, no es un factor totalmente determinante.

HÁBITOS SALUDABLES PREVIENEN LA ENFERMEDAD

Un estilo de vida saludable desde la juventud es clave para lograr llegar a la vejez sin esta condición. Una dieta balanceada, no consumir drogas ni alcohol, procurar estar activo físicamente, y sobre todo mentalmente, podría asegurar una salud mental óptima durante los últimos años de vida.

“Lo que tenemos que buscar es estimular la mente, aprender nuevos idiomas, tocar un instrumento, viajar si es posible, porque las experiencias nuevas son fundamentales para crear nuevas conexiones nerviosas”, informó la psicóloga.

RELACIÓN ENTRE EL ALZHEIMER Y EL COVID-19

 Paradójicamente, la psicóloga acotó que a corto plazo se ha producido un descenso en los casos de Alzheimer debido a que del 25% al ​​45% de los pacientes que fallecieron producto del Covid-19 eran adultos mayores diagnosticados con demencias en ambientes vulnerables.

Sin embargo, se estima que a largo plazo existe un aumento de diagnósticos de Alzheimer debido al daño neurológico como efecto del Covid-19.
“Ya hemos visto muchos casos de personas tanto jóvenes como mayores que luego de padecer esta enfermedad presentan fatiga mental, lagunas mentales, dificultad para recordar, para concentración”, asoma la especialista.

En el caso de las personas con diagnóstico previo de demencia, el aceleramiento del daño neurológico luego del Covid-19 ha sido mayor.

ROL DEL ACOMPAÑANTE

La Fundación Alzheimer de Venezuela promueve el cuidado del cuidador como factor fundamental. Los cuidadores, con el paso del tiempo, se adaptarán en el motor de los pacientes de Alzheimer; por eso es importante que estemos informados de primera mano sobre el padecimiento, proceso y tratamiento especifico del paciente.

Otro factor importante es la organización familiar. “Es imposible para una o dos personas asumir todas las responsabilidades que conlleva cuidar a un paciente de Alzheimer”, asevera la especialista. Esto permite que el cuidador pueda tener su propio espacio y cuidar su salud mental.

A su vez, la Fundación Alzheimer de Venezuela cuenta con personal calificado para cumplir con el rol de cuidador si hay familias que lo requieren por múltiples razones.

FUENTE: Editoría De Notitarde

(Diana Reyes)